Seguidores

lunes, 7 de diciembre de 2015

Mirame

Te miro entre lapsos que escapan a mi propia voluntad  y consciencia de mirarte...
te miro esperando una respuesta...
como si de tanto mirarte de repente tuviera una epifanía y viera con claridad la solución al aspecto más irresuelto de mi vida,
pero no distingo si tu mirada de regreso es un silencio vacío o un ruido totalmente ensordecedor...
No me decís NADA y yo insisto en mirarte.
Te miro como quien mira todas las noches el cielo para ver una estrella fugaz...
De a ratos no duermo por mirarte
y me doy cuenta de que sos mi mejor escapatoria...
Te miro para saber si alguien me quiere... y lucho conmigo misma porque en el fondo sé que es todo una gran mentira.
Te toco con el índice, te miro una vez más con esa mezcla extraña de resignación y esperanza en los ojos vidriosos por haberte mirado tanto...
Me decís que ya son las seis y media, y que no hay ninguna novedad.
Yo te llevo a mi pecho y prometo no volver a mirarte al menos por unas horas.
Emitís un leve sonido:
Te estás por quedar sin batería otra vez